Más información, desglose de los nuevos mecanismos, gasto medio vecinal, código QR al comparador de tarifas, consejos de ahorro y eficiencia… Así será la nueva factura de la luz.
Fundamental. Antes de pensar en ninguna medida de ahorro energético lo primero que hay que intentar es comprender la factura de la luz. También la del gas, pero es algo más sencilla. No hay que engañarse. Es de todo menos fácil… Son de lo más farragoso y lo peor de todo es que muchos piensan que las hacen así a propósito para que nadie se acabe enterando de nada. Ni lo que gasta, ni el precio al que paga la electricidad. Y es que ahora mismo es complicado hasta saber qué tipo de contrato es el que se tiene. Auténtico lío. Por eso, entre todas las medidas de ahorro energético que se han presentado, se ha propuesto también un nuevo diseño. Lo peor es que lejos de simplificarlo, va a añadir más información al recibo. Algo que a la larga puede ser hasta contraproducente.
Llevaba un tiempo sin funcionar y ahora tampoco es que lo haga correctamente. El problema del comparador de tarifas de la CNMC es que no incluye la compensación al gas y, por tanto, las ofertas que refleja no son reales.
Lo mejor para comprobarlo es hacer una simulación de cómo sería la nueva y que cada uno saque sus propias conclusiones… Así, lo primero que va a saltar a la vista es que se van a incluir los (1.) nuevos mecanismos que se han incorporado recientemente. Es decir, tanto el tope del gas de la excepción ibérica como el bono social. Aparecerán los importes exactos que se están pagando por estos conceptos. También habrá otro dato interesante, que más allá de la mera curiosidad estadística poco aporta al consumidor. Se trata del (2.). gasto medio vecinal. Eso sí, siempre con máxima privacidad porque se trata del promedio de todas las personas que viven en un mismo código postal. Sirve para saber si se está realizando un gasto inusual y poco más porque no hay dos casas iguales, aunque estén una al lado de la otra.
Y ahora la gran novedad… El (3.) código QR que redirige al comparador oficial de tarifas de la Comisión Nacional de Mercados y Competencia. Ya aparecía en los recibos en papel, pero ahora lo hará también en la web. Una vez allí, completando algunos datos más, de modalidad de contrato o consumo, se podrá saber cuál es la tarifa más ventajosa para cada caso individual. No es algo nuevo, pero volverá a funcionar porque ha estado deshabilitado durante un tiempo. Eso sí, hay cierto escepticismo también en cuanto a su utilidad, como ha explicado Jorge Morales de Labra en Más vale tarde de La Sexta. La razón es sencilla. En estos momentos la aplicación no incluye en las ofertas el coste del tope al gas y así es muy difícil comparar. Casi imposible.
Por ejemplo, quien tenga un recibo mensual de 60 euros, lo más normal es que todas las ofertas del comparador que aparezcan sean inferiores, pero tiene truco. No es fiable porque no incluye la compensación al gas y en la factura original sí. Por eso, hay que ser cuidadoso porque luego vienen las sorpresas. Volverá a pasar lo mismo o, incluso, puede que con la nueva compañía se pague todavía más. Otra cosa importante… este nuevo modelo se podría empezar a (4.) recibir a partir de diciembre, pero no acaba ahí la cosa. También se ha asegurado que incluirá (5.) consejos de ahorro energético. No se sabe ni cuántos ni como, pero lo que sí que es seguro es que alargará la factura un poco más. Y eso que ya era extensa. Tenía más de 3 páginas en el mejor de los casos y ahora… no se simplificará.