Gas y petróleo

Parecen siempre los mismos, pero va cambiando el precio de los tres sistemas de calefacción más habituales. La bomba de calor puede suponer al año unos 210 euros; la calefacción de gas casi un 50% más y, por último, los radiadores eléctricos multiplican el gasto hasta por 5.
Continuarán las ayudas al transporte público, las medidas del llamado escudo social y la mayoría de las medidas anticrisis como la bajada del IVA de los alimentos básicos. Mientras el de la luz irá recuperando progresivamente sus valores habituales.
Fenómenos aparentemente sin conexión, pero que elevan el barril de petróleo hasta límites insospechados. Lo mismo con el gas y, por tanto, con la electricidad y lo que es peor con todos los bienes básicos. Dependencia energética e inflación.