Demasiado alto. Tan solo este verano se ha superado el tope del gas de 180 euros/MWh. Ni siquiera en agosto, cuando fue de 350, se hubiera aplicado porque tiene que darse otro requisito.

“Importante la capacidad de generar consenso en situaciones tan difíciles como la actual crisis energética… nadie debe apropiarse de la idea… lo fundamental es que hoy el Consejo de Energía ha dado una respuesta y, por tanto, los 27 miembros de la UE”. Teresa Ribera.
No ha sido fácil. Si llegar a un acuerdo entre dos partes o personas es complicado, más aún resulta cuando participan 27. Y más si cada uno es diferente y tiene sus propios intereses. Sobre todo, si además son económicos. Alemania y Holanda se resistían, los más dependientes del gas, pero al final han cedido. Eso sí, solo un poco. Tras meses de disputas políticas con múltiples propuestas, cartas conjuntas, reuniones de urgencia y declaraciones cada vez más tensas, la Unión Europea ha aprobado este lunes su primer tope de la historia para el precio del gas. El límite se ha fijado en 180 euros/MWh. Quizá demasiado alto y, además, no es tan sencillo como parece. No basta con que se supere el límite. Tiene que haber algo más.

El tope fijado por la Unión Europea se activará cuando los precios del gas alcancen los 180 euros/MWh durante al menos tres días consecutivos de cotización. Así, se mejora la propuesta inicial de 275 durante 10 jornadas.
Tan alto es el límite que, como ha explicado Jorge Morales de Labra en El programa de Ana Rosa, solo se hubiera puesto en marcha una vez en toda la historia. Es decir, exclusivamente se ha superado la barrera de los 180 euros durante el pasado verano. Durante un tiempo, cuando Rusia cerró el grifo del gas a Alemania y, además, se produjeron sabotajes en los gaseoductos, se batió el récord máximo: más de 350 euros/MWh. Casi el doble del que la Unión Europea de forma más que probable implantará a partir del 1 de febrero de 2023. Por tanto, es solo para situaciones extraordinarias y en el día a día no se va a notar. Ese momento ya ha pasado. Hoy el precio es de 100 euros en el mercado TTF y en España cuesta algo menos de 80. Lejos ya de esas cifras de récord.
El tope del gas supone una decisión sin precedentes. No había pasado hasta la fecha. Por primera vez en la historia la Unión Europea ha intervenido un mercado energético y por eso es difícil predecir cómo afectará en la práctica.

Aun así, siempre hay que recordar que el precio normal (o habitual) no debería superar los 20 euros por MWh. Ahora es cuatro veces superior, pero mucho menor que el acordado. De hecho, es la mitad. Por tanto, ese límite es demasiado alto. Casi estratosférico y además hay una cosa muy importante. Ni siquiera cuando el precio superó los 350 euros se hubiera puesto en marcha. Además, tendrían que darse más requisitos como que el límite de 180 euros se supere durante más de tres días consecutivos y coincidir simultáneamente con otro escenario más complicado todavía. El precio debe ser también 35 euros superior a la referencia de mercado del gas natural licuado en las mismas jornadas. Y eso es ya rizar el rizo para no tener que aplicarlo en ningún momento. Por ejemplo, en agosto no se hubiera aplicado porque era similar al de Japón.