Olas de calor, aumento del consumo y de las exportaciones a Francia… Pese a todo, la excepción ibérica está consiguiendo contener las subidas del precio de la energía y, a su vez, la crisis energética dando impulso a las renovables.
Primer mes de la excepción ibérica y aparentemente poco han cambiado las cosas. Al menos en lo que se refiere al precio de la luz. Lejos de haber bajado ha pasado todo lo contrario no para de subir, aunque lo hace de forma más contenida. Interminables olas de calor, mayor consumo de electricidad, más gas que nunca para generarla, mayores exportaciones a Francia… Muchas son las causas que se pueden encontrar a este fenómeno. Sin embargo, la principal es que todo ha coincidido con una espectacular subida, precisamente, en los mercados internacionales del gas. Allá por mediados del mes de junio, cuando entró en vigor el límite a su precio, cotizaba a 80 euros/MWh. Mucho más que lo habitual que hasta hace bien poco era de 20. Pues ahora, aún más. Por encima de los 200 euros por MWh y eso son 10 veces por encima de lo normal.
Es decir, que si apenas hace un mes y medio ya era extremadamente caro, ahora lo es aún más. Nada más y nada menos que el doble que el 15 de junio. Sin embargo, sí que se ha conseguido otra cosa muy importante. Más de lo que parece a simple vista porque todo el mundo en lo que se fija es solo en el importe de la factura. De importancia capital porque ha logrado contener el precio de la luz. Mucho más que en otros países de Europa. En Francia, por ejemplo, y eso que también se benefician indirectamente de la Excepción ibérica, está en más de 500 euros/MWh. Y en Alemania tampoco baja de los 300. Mucha diferencia, aunque lo que importe sean los recibos y su impacto sobre la inflación. El recibo de julio será más alto que el de junio, pero hay que pensar en positivo.
El primer mes completo con la excepción ibérica deja sensaciones agridulces. El precio de la luz no baja, pero sube mucho menos que en otros países. Más barata que en el resto de Europa.
Es decir, en el gran incremento que habría experimentado de no existir el mecanismo. Por eso, hay quien ahora se acuerda de las renovables que para muchos son las grandes olvidadas. No de ahora sino desde hace muchos años y que podrían haber aliviado un poco el gasto en energía de las familias. Tampoco, para Jorge Morales de Labra en Noticas 24 horas de TVE, es del todo así. No son las olvidadas de esta historia, pero hay que reconocer que en el pasado han tenido sus dificultades. Durante mucho tiempo, más de 7 años, estuvieron en España casi perseguidas con el ya célebre impuesto al sol. Hacía mucho más complicado algo que siempre debió ser de lo más sencillo: instalar paneles solares en casa. Ahora se pagan las consecuencias, aunque también hay que decir que la cosa ha mejorado bastante.
Desde que se eliminó el impuesto el despliegue se ha intensificado. Sin prisa, pero también sin pausa. Buenas noticias, pero sigue habiendo algunas limitaciones. En España el principal obstáculo para su desarrollo sigue siendo la burocracia. Demasiado papeleo y, además, se suelen dilatar bastante en el tiempo. Ni práctico ni tampoco rápido. Eso sí, también tiene una parte positiva y eso es lo que hay que tener siempre en mente. Ya sea por el precio de la electricidad o por temor al desabastecimiento, no hay ya quien no los quiera en su tejado. Sobre todo, en el ámbito doméstico. La mayoría están como locos por poner paneles solares lo antes posible. Más que nada porque si antes ya eran rentables económica, social y medioambientalmente ahora lo es mucho más vista la situación actual. Salen las cuentas mejor que nunca y la amortización se acorta sustancialmente. No hay que esperar…
