Mientras la bomba de calor tiene un coste aproximado de 455 euros al año, el gas sube la factura hasta los 545 y eso que está subvencionado y con el IVA rebajado… Con las cifras en la mano, el futuro de la calefacción parece claro, la aerotermia viene rompiendo moldes.
Dependiendo del sistema de calefacción empleado la factura puede pasar de menos de 500 euros al mes a más de 1.000. Más del doble y la verdad es que con tanta subida y bajada de precios uno ya no sabe nunca si eso es mucho o poco. Las cifras están ahí… por supuesto, en la respuesta a esta pregunta entran en juego ciertos factores como el presupuesto familiar o el tamaño de la vivienda. Con independencia de eso todo el mundo tiene un objetivo. Pagar, cuanto menos mejor y más con todo lo que ha ocurrido recientemente. En los últimos años ha habido sustos con el gas. Casi siempre en lo más frío del invierno cuando no queda más remedio que poner la calefacción. Por eso, seguro que ya hay quien se ha planteado un cambio, pero ¿cuál es la recomendación?
Sin lugar a duda, el futuro de la climatización y, por supuesto, de la calefacción es eléctrico. Más alto y claro no se puede decir. ¡El gas no es la solución! Fue el epicentro de la crisis energética y continúa siendo un mercado inestable. Por este motivo, si a cualquier persona se le estropea la caldera hay que ir pensando en otras alternativas. En realidad, solo en una, la aerotermia. Cambiar a una bomba de calor que, aunque requiere de una cierta inversión es asumible en la mayoría de los casos. Además, cuenta con importantes ayudas y subvenciones de la Unión Europea. En otros países del continente como Alemania ya está directamente prohibida la instalación de gas. Y en España… acabará pasando lo mismo antes de lo que se imagina.
Lo más probable es que en apenas un par de años las casas nuevas ya no van a poder contar con calefacción de gas. Hay señales desde Europa de que el gas se va a acabar pronto por muchas razones. Ya no es solo por las consecuencias económicas que ha tenido la invasión de Ucrania ni tampoco por reducir la dependencia del gas de Rusia, o de otros países. Va más allá. Fundamentalmente porque utilizarlo como fuente de energía es mucho más caro que hace apenas unos años cuando casi se regalaba. De ahí que fuera uno de los sistemas más extendidos.
El cambio de tendencia no se nota todavía porque la factura del gas está contenida. Sigue siendo un poco más barato porque en primer lugar tiene una subvención de más de 3.000 millones de euros por parte del Estado. Es algo que lo tiene que saber todo el mundo. Y, por si todo esto fuera poco, además el IVA está rebajado del 21% al 5%. Ambas iniciativas están incluidas dentro del famoso paquete de medidas anticrisis para contener el precio de la energía. En caso contrario sería mucho más caro. Más que la electricidad. Con la irrupción definitiva de las renovables en la generación se ha conseguir este año un hito histórico. Por primera vez más de la mitad de la luz producida en España a lo largo de 12 meses va a ser de origen sostenible. Cifra muy relevante porque es lo que está consiguiendo hundir los precios…
Lo hace cuando el viento sopla con fuerza, luce el sol con intensidad o llueve a raudales. No solo los deja casi a cero, también es importante porque consigue estabilizar los precios a largo plazo.
Por tanto, hay otra opción muy interesante mientras se van sustituyendo los sistemas existentes. Sin ser del todo conscientes, en muchos hogares ahora mismo conviven la bomba de calor del aire acondicionado y las calderas de gas. Así, en estos días en los que la calefacción no está puesta todavía durante todo el día se pueden aprovechar estos precios bajos de la luz. Además, es casi gratis en muchos momentos. Dependiendo de la hora, del día de la semana y las renovables puede llegar a costar menos de un par de euros cada 24 horas… Eso sí, tiene un inconveniente. Hay que estar muy pendientes de cuál elegir porque el precio de la luz cambia contantemente y merece la pena prestarle atención. Lo ideal es ir combinando ambas tecnologías y quien esté pensando en cambiar de caldera debe considerar ya mismo la opción de la aerotermia.