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Regular el precio de hidroeléctricas y nucleares

Tanto ha subido la luz que se suceden las propuestas para contenerlo. La última podría empezar a dar en el clavo: regular el precio de hidroeléctricas y nucleares. Retribución fija o máxima, pero ¿es compatible con la legislación europea?

No hay varitas mágicas ni fórmulas magistrales, pero hay que intentarlo como sea. Récord tras récord, un día sí y al otro también, da la sensación de que no hay quien pueda con el precio de la luz. Nada parece poder contenerlo. Ni la rebaja del IVA ni la supresión del impuesto a la generación han servido de mucho. El precio de mercado lo ha neutralizado en semanas y ya hay que pensar en otra cosa. Tomar cartas en el asunto y así se suceden las ideas para ponerle freno y poder hacerle frente. No es tarea sencilla, pero por fin parece que una podría ir en la dirección correcta. Hasta 3.000 millones de euros se podrían ahorrar los consumidores en la factura de la luz con la última de las propuestas. La idea es aparentemente sencilla.

En el mercado eléctrico al ser marginalista, todas las centrales cobran por la luz el precio de la tecnología más cara que ha entrado en producción para satisfacer la demanda y es un sistema compartido por más de 20 países de la UE.

Tan fácil y a la vez tan complejo como que la CNMC ponga retribución fija a la energía nuclear y también un precio máximo a la hidroeléctrica. Algo que, como ha explicado Jorge Morales de Labra en Hoy por hoy de la Cadena SER, tiene mucho sentido. No pocos son los meses en los que no se ha parado de hablar del precio del gas y de los derechos de emisión de CO2. Disparados en los mercados hasta valores jamás vistos antes. Extraordinariamente altos y eso no es lo peor. Están arrastrando al resto de tecnologías de generación eléctrica por el propio mecanismo de fijación de precios del sistema marginalista. Ya se sabe… la más cara de todas es la que marca el precio de las demás. Agua a precio de champán y eso no puede ser.

Regular el precio de hidroeléctricas y nucleares - Portada
Regular el precio de hidroeléctricas y nucleares – Hoy por hoy de Cadena SER (24 de agosto de 2021).

Así, la única forma de acabar con la situación es romper la baraja. Alterar el sistema marginalista y la propuesta lo intenta haciendo que el mayor precio del gas no afecte a una parte importante de la producción. En total, a cerca del 35%, o 40% dependiendo de las lluvias anuales, que es el porcentaje que se genera con nucleares e hidroeléctrica. Es decir, limitar los ingresos de estas tecnologías para acabar con la escalada de precios. No es mala idea, pero no es inmediato. Y es que la propuesta solicita a la CNMC que haga un informe para determinar la retribución. Lleva su tiempo. No es algo que se haga de la noche a la mañana. Sin embargo, existen otras fórmulas para ponerlo en marcha de acuerdo con la legislación europea que es la gran duda que genera.

Sin embargo, hay otros países de Europa en los que no todas las fuentes de energía pasan por el mercado mayorista o en los que, aunque formen parte de la subasta, no quiere decir que todas las tecnologías vayan a percibir el precio marginalista.

Es posible hacerlo, pero hay que justificarlo muy bien. Cómo se haga es esencial para que salga adelante la medida. Importante por dos motivos. Primero porque ya hay algunos países de la UE en los que no toda la energía pasa por el mercado mayorista. También, porque hay otros en los que aun participando en la subasta eso no quiere decir que vayan a cobrar necesariamente el precio más alto del sistema marginalista. Ya es así en algunos lugares de Europa y por eso está claro que hay formas de solucionarlo compatibles con la legislación. Eso sí, hay que explicar los motivos de forma clara para excluir a estas dos tecnologías (nuclear e hidroeléctrica). Aquí van algunas ideas y la vedad es que bien pensado son de lo más lógicas y coherentes.

Regular el precio de hidroeléctricas y nucleares
Regular el precio de hidroeléctricas y nucleares – Hoy por hoy de Cadena SER (24 de agosto de 2021).

El argumento es demoledor. No tienen competencia y eso es más que suficiente. Razón de peso. El sistema marginalista solo funciona y tiene sentido cuando las tecnologías se pueden disputar los beneficios entre sí. Quizá en su momento cuando se hizo la legislación compartida en más de 20 países se pensó que la habría, pero no es así. Imposible. En un mundo ideal si se puede producir electricidad a 20 y se está cobrando 100, más de una empresa querría hacerse con esa cantidad de beneficios. No hay negocio en el mundo con rentabilidad del 500% y, por tanto, oferta tras oferta el precio se iría acercando a esos 20 en los que ya se gana dinero, ¿no?

El sistema marginalista solo funciona y tiene sentido cuando las tecnologías se pueden disputar los beneficios entre sí. Sin embargo, hay fuentes de energía que no tienen competencia. Nadie puede construir nucleares e hidroeléctricas como en el pasado.

El problema es que ahora mismo nadie puede hacerles competencia. Tampoco es ya posible construir centrales nucleares como en los años 80 ni mucho menos hidroeléctricas. Impensable pensar en anegar pueblos en el siglo XXI y esa ya es una razón muy potente y poderosa cómo para poner en marcha la propuesta. No es la única, hay más… Entre ellas que se han construido con el dinero de todos para que ahora se enriquezcan un par de empresas o tres. Además, los que invirtieron en esas tecnologías no han corrido ningún riesgo. Su retribución siempre ha estado garantizada. Desde el primer día. Por tanto, parece que hay suficientes motivos como poder establecer en la ley una singularidad retributiva a algunas centrales y sacarlas ya mismo del modelo general.

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