¡Adiós a los 20 céntimos de los combustibles y sube la gasolina! Sin embargo, con el gas pasa algo más curioso baja en los mercados internacionales, pero aumenta la tarifa regulada. Entonces, ¿sigue compensando la TUR?
El 2023 ha llegado exactamente igual a como terminó el anterior. Es decir, con mucha energía y también con bastante preocupación. Cosas del sector. Casualidad o no, nunca se sabe, ha sido quitar la bonificación de los 20 céntimos a los combustibles y tanto gasolina como diésel vuelve a subir. Hasta los 1,77 euros en el caso del primero y a los 1,88 en el caso del segundo. No acaba ahí la cosa porque también sube el gas en la última actualización de la tarifa TUR. Exactamente un 8,6%, pero sigue siendo la mejor opción para cada vez un mayor número de consumidores. Lo dice la CNMC que además asegura que mientras el gasto en calefacción del mercado regulado sería de unos 600 euros anuales, en el libre superaría los 1.100. Más económica y beneficiosa para las familias y también para las comunidades de propietarios.
Aun así, y mirando al futuro, parece que los mercados energéticos están más tranquilos, pero el riesgo de que vuelvan a las andadas siempre está ahí. Sin embargo, todo apunta que no. A que hay buenas noticias y la tensión se está relajando. Eso sí, es cierto que el gas sigue en precios mucho más elevados de los habituales y que es el epicentro de la crisis de la energía. El origen y donde está el auténtico problema. Pues, hoy ya está cotizando por debajo de los 70 euros MWh por primera vez desde enero del año pasado. Es decir, desde antes de que se iniciara la invasión de Ucrania. Tampoco hace falta recordar que en agosto llegó a los 350. 5 veces más, pero lo normal es que fuera de 20. Por este motivo muchos son los que se preguntan si sigue compensando la TUR y hasta cuándo.
Por supuesto, porque, como ha explicado Jorge Morales de Labra en En jake de EiTB, hay que tener en cuenta que la mejor oferta del mercado libre está en torno a los 15 céntimos. Más del doble que la tarifa regulada que está subvencionada por el Gobierno. Esta última está ahora mismo a 7 céntimos incluyendo la última actualización del pasado 1 de enero. Sigue siendo la mejor opción, aunque la diferencia se ha reducido en las últimas semanas. Hace apenas un mes era tres veces superior. De 21 céntimos/kWh mientras que la oficial era todavía más barata. Poco más de 6. De este modo, a pesar de la subida del 8% sigue mereciendo la pena, aunque es cierto que la distancia entre ambas es menor. Y la tendencia es a que siga reduciéndose.
Seguramente, dentro de un par de meses, de seguir bajando el precio en los mercados internacionales, quizá habría que recomendar lo contrario. Cambiarse al mercado libre, pero de momento es más barata la tarifa regulada.