El mito de que más de la mitad de la factura de la luz son impuestos
¿Es cierto que más de la mitad de la factura de la luz son impuestos? Descubre la verdad sobre cómo se desglosa realmente la factura eléctrica en España para desmentir este mito común.
Entender la factura de la luz no es sencillo. Lo sabe todo el mundo. Especialmente aquellos que lo han intentado en alguna ocasión. Si ya es complicado de por sí los constantes cambios en la legislación que se han realizado en los últimos años tampoco ayuda. No hay por dónde cogerla. Por ejemplo, ahora se decide que el bono social se va a pagar entre todos los consumidores y se añade una nueva línea en los recibos que lo refleja. Así con todo. Luego hay suplementos territoriales que cambian de una comunidad a otra y eso por no hablar del lío de los impuestos. ¡Hasta 4 cambios ha habido en el IVA en los últimos dos años! En realidad, pocos sabrían si en estos momentos está al 21%, al 10% o si se mantiene en el 5%. Y esto favorece la confusión y la aparición de mitos que son verdaderos.
Uno de los mitos más extendidos sobre la factura de la luz en España es que es uno de los países de Europa en el que más impuestos se paga. Incluso se llega a afirmar que más de la mitad del importe total de los recibos los son. Este mito ha calado hondo, generando una sensación de injusticia y alimentando la creencia de que las cargas fiscales son desproporcionadas en comparación con el consumo real de electricidad. Es fácil caer en esta percepción, ya que los conceptos en la factura no siempre son fáciles de entender. Las distintas partidas pueden dar la impresión de que casi todo lo que pagamos se destina a impuestos. Sin embargo, esta visión distorsiona la realidad. Aunque los impuestos juegan un papel en el total, no son, ni de lejos, la mayor parte del recibo.
El mito de que más de la mitad de la factura de la luz son impuestos – Canarias Radio (10 de septiembre de 2024)
¿Cuánto suponen los impuestos en la factura de la luz?
En esto existe cierta confusión porque depende de lo que se consideren impuesto propiamente dichos. Hay muchas personas y, sobre todo, empresas que aseguran y dicen que más de la mitad del recibo de la luz lo son. No es cierto. Hay que hablar con propiedad. Lo que supone más del 50% de las facturas son los costes regulados, pero eso no son tributos. Son los cargos que están regulados en el BOE y son algo completamente diferente. Se refieren a algunos servicios como el transporte de la energía en los que no hay competencia posible y los fija el Gobierno para evitar abusos. En ningún caso deben considerarse como impuestos.
La factura de la luz está compuesta por varios elementos, y los impuestos son solo una parte de una estructura más compleja que incluye los costes de la energía, las redes de distribución y los cargos regulados que financian, entre otras cosas, las energías renovables y las infraestructuras eléctricas.
Estrictamente hablando en la factura de la luz solo hay dos: el impuesto especial de electricidad que supone algo más del 5% y el IVA. Ahora este último está reducido al 10% debido a que los precios de la electricidad en el mercado mayorista están superando los 45 euros por kWh. Así que… entre los dos suman en torno al 15% del total del recibo. Eso por el momento, porque en condiciones normales llegarían a sumar el 26%. En realidad, son entre una cuarta y una quinta parte de la factura. Ni más ni menos. El resto, aunque depende de los casos, son los costes regulados y la energía que se consume.