No hay que fijarse solo en el descuento del Plan RENOVE de electrodomésticos porque el ahorro en el recibo de la luz por cambiar de clase C a A+++ es mucho mayor que la propia subvención.
Doble oportunidad económica, que siempre viene bien. Primer ahorro, el más evidente. El de la propia subvención que para empezar no está nada mal. Entre 70 y 150 euros de descuento directo dependiendo del tipo de electrodoméstico y que, además, durará muy poco. Apenas un par de meses. Eso con suerte. A veces se agota en apenas unos días. Pero, sin que casi nadie se dé cuenta, el segundo ahorro puede ser aún más importante. Mucho más. Eso sí, a más largo plazo. No es tan inmediato, aunque se puede empezar a notar desde el siguiente recibo de la luz. Ahí está la clave del Plan RENOVE de electrodomésticos: cambiar los frigoríficos, lavadoras y lavavajillas antiguos, y los que más consumen, por otros más modernos y, sobre todo, eficientes. De hecho, para poder acceder a la bonificación deben ser sustituidos por otros de la máxima clasificación energética: A+++.
El Plan RENOVE de electrodomésticos subvenciona con hasta 150 euros la sustitución de frigoríficos, lavadoras y lavavajillas por los modelos más eficientes con clasificación energética A+++
Ahora más que nunca, cuando se vaya a comprar un electrodoméstico, sea del tipo que sea, hay que fijarse muy bien en la etiqueta de clasificación energética. Importante porque ese código de letras y colores lo que indica es el consumo del aparato. Eso para quienes vean el frigorífico medio vacío, porque para los que lo ven medio lleno significa todo lo contrario. El ahorro en el recibo de la luz que va a tener todos los meses. Pues, en la mayoría de los casos, compensa, y más si parte de su mayor precio está subvencionado con el Plan RENOVE. Doble ahorro, por tanto. Compensa, incluso, sin la subvención. Aun así, seguro que siempre hay escépticos. Pues para demostrarlo Jorge Morales ha hecho todos los cálculos en el programa Está pasando de Telemadrid. Eso sí, teniendo en cuenta que el sustituido por el más eficiente A+++ es de clase C.
No es algo tan exagerado, de verdad. Tampoco extraño. Por ahí todavía se pueden ver muchos de clase F. Sobre todo, frigoríficos tan antiguos que su consumo eléctrico puede ser de más 300 euros al año. El electrodoméstico que más gasta porque es el que más tiempo está encendido. Lo está siempre, 24 horas al día. Sin embargo, con uno de clasificación energética C, la factura ya baja a menos de la mitad. Sigue siendo demasiado, porque al pasar de este último a uno A+++ con el plan RENOVE se pueden ahorrar aún otros 60 euros. Eso durante todos los años de su vida útil. En total, 600 euros que sumados a los 150 de la subvención hacen que el cambio de nevera salga casi gratis. Por muy poco. Claro, eso a largo plazo y si la obsolescencia programada no hace de las suyas en algún momento inesperado.
Con la sustitución de los tres electrodomésticos acogidos al Plan RENOVE por modelos más eficientes, ahorro importante también en el recibo de la luz de hasta 120 euros anuales.
No es una leyenda urbana. Muchos dispositivos están pensados para que solo funcionen durante un tiempo determinado o tengan un limitado número de usos. Después se estropean, es así. Por eso, recientemente se ha aprobado una legislación europea para combatir la cultura de comprar y tirar. Otra cosa es cambiarlos por modelos más eficientes. Sostenibilidad y, por supuesto, ahorro con iniciativas como el Plan RENOVE de electrodomésticos. Pues, lo mismo sucede con lavadoras y lavavajillas. Ambos son muy parecidos y, de nuevo, por cambiar los de clasificación C a A+++ el descuento en el recibo de la luz es de 30 euros anuales. Ahorro que se multiplica. En total, la sustitución de los tres principales electrodomésticos del hogar son 120 euros menos al año en electricidad. 1.200 en una década y eso sin contar con el dinero de la propia subvención. Doble ahorro, más eficiencia y respeto por el medioambiente.