El camino hacia la Transición Energética y el 0 en las facturas energéticas irá sobre ruedas. Las de los coches eléctricos que con sus baterías pueden complementar al autoconsumo fotovoltaico y a los sistemas de climatización renovables.
¡Claro que es posible! El futuro, lo más innovador y también lo más sostenible, es no pagar por la energía que se consume. Así de claro, 0 absoluto en las facturas energéticas. Eso sí, tampoco es cuestión de hacer un sin´pa en la gasolinera de turno después de repostar o de rechazar los cargos del recibo de luz que luego enseguida vienen los cortes y los problemas. Se trata de que avanzar, por tanto, hacia un nuevo modelo más responsable y beneficioso para todos. Sí, ahorrar en el recibo o anularlo con la producción de la propia electricidad. El autoconsumo con paneles solares es ya una realidad para muchas familias. Lo mismo con el del gas mediante la instalación de sistemas de climatización renovables como aerotermia o geotermia. Aún hay más. También se puede decir adiós al gasoil si a todo esto se le suma el coche eléctrico.
No hay que engañarse, llegar al cero absoluto en energía no es para nada fácil. Hay demasiados intereses en juego de algunas de las más importantes compañías. Así, lo primero que habría que hacer es reconocer que el negocio ha cambiado. Ya no está en llenar depósitos de combustible o en vender electricidad. Ahora está en ofrecer soluciones energéticas para conseguirlo. Ese es el desafío y también el futuro. La razón es muy sencilla y la ha contado Jorge Morales de Labra en el programa Luz de cruce de COPE Valencia. Dentro de muy poco la gente va a producir más electricidad con los paneles solares de sus tejados de la que van a comprar de la red. A partir de ahora, la clave estará en gestionar la energía adecuadamente. Ahí es donde se abre un gran abanico de posibilidades más allá de repostajes o llevar electricidad a los enchufes.
0 en electricidad con autoconsumo. 0 en gas con sistemas de climatización renovable como aerotermia o geotermia. Y, adiós a la gasolina con el coche eléctrico.
Así, servicios de valor añadido y personalizados como los que ofrece Próxima Energía pueden ser de muchos tipos. Desde sencillas soluciones para optimizar el rendimiento de instalaciones fotovoltaicas domésticas hasta otras más complejas de almacenamiento Eso sí, adaptadas a las necesidades de cada consumidor en todo momento. Sin ir más lejos, hacer que la depuradora de una piscina particular entre en funcionamiento solo en las horas de más sol para aprovechar la producción de los paneles. Así, en función de la previsión meteorológica el sistema decide de forma automática si se conecta o no. Simple y muy efectivo. Es darle una vuelta más al negocio y no limitarse a poner un contador y leerlo mensualmente. Hay mucha vida más allá de enviar facturas cada 30 días. Pues lo mismo sucede con el coche eléctrico.
Ya nadie duda que la tecnología eléctrica es imbatible. También aquí hay muchos servicios que se pueden ofrecer empezando por lo más básico. Hacer los cálculos correctos para saber si les compensa o no, cuánta autonomía deben tener dependiendo de sus necesidades y, por supuesto, el ahorro que van a obtener por pasarse al coche eléctrico. Ahora es cuando suelen surgir las dudas respecto a la intermitencia de las renovables. Solo un dato para despejarlas todas de golpe. El pasado mes de noviembre Estados Unidos batió todos los récords de producción. Sobre todo, la vinculada a energía fotovoltaica. Así, la cosa cambia mucho y más si se cuentan con buenos sistemas de almacenamiento. Ya no hace falta esperar a que salga o sople el viento.
Las baterías de los coches eléctricos que ya se ven en los concesionarios pueden llegar a almacenar la misma cantidad de energía que la que consume una familia en toda una semana.
Pues, no hay mejor sistema de almacenamiento de energía en el ámbito doméstico que el coche eléctrico. Todo está relacionado. Auténtica sinergia. Los modelos que ya están disponibles en los concesionarios recorren fácilmente más de 500 kilómetros en ciudad. Baterías de 60 kWh y el consumo de electricidad medio diario de una familia no llega ni a los 10 kWh. Es decir, son capaces de almacenar la misma cantidad de energía que la que se consume en una casa durante toda una semana completa. Impresionante. Ahí, hay un gran potencial. Mucho más de lo que se puede imaginar. Tan solo hay que invertir el proceso de carga para complementar el consumo doméstico en determinados momentos. Cargarlo de energía durante el día y liberarla por la noche cuando la autoproducción se reduce. El llamado V2G que ha llegado con el coche eléctrico para que la Transición Energética vaya sobre ruedas.
