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Misión (no) Imposible: bajar la factura de la luz

¿Es posible bajar la factura de la luz? Estas son algunas de las principales medidas energéticas acordadas por el nuevo Gobierno de PSOE y Unidas Podemos para tratar de conseguirlo

Misión (no) Imposible: bajar la factura de la luz

Muy difícil, pero no imposible. Sin efectos especiales, estrellas de Hollywood ni una banda sonora pegadiza. La gran promesa electoral de siempre. Pero antes de hacer números y proponer medidas para intentar bajar el recibo de la luz hay que entender muy bien las cuatro partes que lo forman para trazar un plan. En total, son mercado, peajes, cargos e impuestos. El primero hace referencia al precio de la electricidad y el segundo a lo que cuesta llevarla hasta cada una de las casas. Hasta ahí todo bien. Luego vienen los cargos y ahí la cosa se complica. Cabe un poco de todo, desde las primas a las renovables de la primera generación hasta el llamado déficit de tarifa. Cajón de sastre en el que todo vale y acaba encareciendo y mucho el recibo. La última parte es directamente el IVA y el Impuesto sobre la electricidad.

Cada una de las 4 partes de las que se compone el recibo de la luz supone más o menos un 25% de la factura total. Su coste, por tanto, es similar.

Ahora sí, con los conceptos bien claros es el momento de ir analizando las medidas que se podrían poner en marcha en cada una de las partes del recibo para bajar el precio de la luz. El plan para asaltar al precio de la luz propuesta a propuesta. No será una tarea sencilla ni única. Tal y como ha explicado Jorge Morales de Labra en Más vale Tarde de La Sexta, se deben aplicar varias a la vez. Todo para que sean realmente efectivas y den el resultado deseado para todos: un recibo eléctrico más ajustado y accesible. ¿Por dónde empezar a meter mano a la factura de la luz?

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Misión (no) Imposible: bajar la factura de la luz – Más vale Tarde de La Sexta

Lo más lógico es empezar por la parte de mercado. Aquí es donde las renovables tienen mucho que decir. Más electricidad y más barata. No es ningún secreto que cuanto mayor sea su aporte al sistema más debería bajar el precio. Tendencia al alza. Pues bien, de lo que se trata ahora es que su menor coste de producción se aplique directamente en el recibo. Que se beneficie el consumidor evitando, por tanto, que solo sirva para hacer crecer aún más los beneficios de las grandes eléctricas. Para conseguirlo el método que ha propuesto el Gobierno es, precisamente, ordenar la entrada de renovables. Mediante subasta al precio más bajo procurando así que se vuelvan a concentrar en unas pocas empresas que puedan manipular los precios a su antojo.

La desaparición de los llamados beneficios caídos del cielo supondría un ahorro de nada más y nada menos que 3.000 millones de euros en la factura de la luz

Sin duda, otra de las medidas que ha desatado más polémica es la de eliminar los llamados beneficios caídos del cielo. De vital importancia porque por sí solos, y sin que nadie entienda bien lo que significan, se estiman en 3.000 millones de euros anuales. No es poco. Y más si se tiene en cuenta que cuando se anunció las eléctricas perdieron mas de 1.000 millones en bolsa. Casi transcendental porque afecta dos tecnologías cuyo coste de producción está muy por debajo de lo que cobran por la energía. La hidroeléctrica y la nuclear tienen unos enormes beneficios extraordinarios. Caídos del cielo, porque hay que recordar que fueron construidas en un entorno no liberalizado y no como el actual.

Misión (no) Imposible: bajar la factura de la luz – Más vale Tarde de La Sexta (16 de enero de 2020)

Hasta ahora todas las medidas propuestas afectaban solo al bloque del mercado. Solo al 25% del recibo total, pero aún hay más donde intentar tocar con el objetivo de abaratar el recibo. La limitación del término de potencia afectaría tanto a los peajes como a los cargos. La parte fija de la factura. Costes regulados que no dependen del mercado y que son publicados en el BOE. El problema para llevarla a cabo es que algunas de estas competencias el Gobierno las ha transferido a la CNMC. Hay una voluntad de hacerlo, pero ahora se depende de un tercero para hacerlo. Aun así, es relevante porque el Gobierno del PP la duplicó en tan solo 7 meses y nadie entendía por qué pagaba más consumiendo menos.

Misión (no) Imposible: bajar la factura de la luz – Más vale Tarde de La Sexta (16 de enero de 2020)

Tan importante como bajar el precio de la luz es crear un modelo adecuado en el que la eficiencia energética sea el eje central

Y luego hay otra cuestión, los impuestos. Y es que cada vez que suben, lo hace también la luz. 21% de IVA que podría subir aún más. Por eso hay ya quien pide un impuesto reducido para la electricidad. O eso o que por lo menos para los primeros kWh que se consideren como una primera necesidad como ya ocurre con el recibo del agua. Más complejo de lo que parece. Sobre todo, a la hora de determinar la cantidad. No es la misma necesidad para una familia con calefacción eléctrica que con otra tecnología como el gas, ¿verdad? Además, competiría en desigualdad de condiciones. Tampoco todos los usos de la luz son los mismos.

Aun así, hay fórmulas que lo hacen posible. Sin ir más lejos, Portugal ha reducido impuestos bajando el precio de la luz. Así que seguro que pronto llegarán más propuestas y medidas que, además, incentiven la eficiencia energética. Misión difícil, pero (no) imposible.

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