Sin sustos ni sorpresas en el recibo de la luz

Todos los trucos, consejos, falsos mitos, y hasta hechizos y supersticiones sobre el consumo de los electrodomésticos: las claves para minimizar su impacto en la factura de la luz. Sin sustos ni sorpresas…

No es cosas de brujas ni de conjuros o maldiciones, que tanto se llevan en Halloween. Por mucho que se trate de ahorrar, la factura de la luz no para de subir… y tampoco es cosa de hechizos, magia o encantamientos. Ni siquiera apariciones. Más bien todo lo contrario. Lo de los duendes y las desapariciones solo pasa con los calcetines de la lavadora. Y si hay un espíritu demoniaco en cada casa es solo la secadora. Mejor dejar secar la ropa al aire y nunca sobre el radiador, porque esa es la peor pesadilla de cualquier ingeniero industrial. Eso sí, para que la factura de la luz no le termine quitando el sueño a nadie hay pequeños trucos y consejos que funcionan mejor que cualquier antídoto, como ha recordado Jorge Morales de Labra en Mediodía COPE. Sí, todos los electrodomésticos los tienen, incluso el frigorífico.

El que más consume de todos, pero solo porque es el que más tiempo está enchufado. Tampoco hay que buscarle tres pies al gato ni explicaciones paranormales. Pues con solo poner la temperatura de la nevera a 5ºC y la del congelador a -18ºC se pueden ahorrar hasta 5 euros al mes. No es magia, solo eficiencia. Eso y lo más importante, mirar la etiqueta de clasificación energética antes de comprarla. Por ejemplo, un modelo de los antiguos, la de las de casa de la abuela, gasta fácilmente 7 u 8 veces más que una de las nuevas. Así de fácil para ahorrarse un buen susto con el recibo. Y es que con los actuales precios de la electricidad tener un modelo viejo en una segunda residencia puede suponer hasta 600 euros al año. Auténtico Expediente X o Warren si apenas se usa al final un par de meses.

No tender sobre el radiador ni dejar siempre encendida la calefacción, lámparas LED, regletas con interruptor, bajar la potencia, vigilar la temperatura… ¿Funcionan los trucos para ahorrar en el recibo de la luz?

Peor aún con los calefactores del baño, los radiadores de aceite, … Este año todo eso debería estar terminantemente prohibido. A partir de ahí le siguen: lavadora, lavavajillas, vitrocerámica, … Nada de tenerla siempre encendida como la niña de Poltergheist, que luego pasa lo que pasa. Además, las viejas de tubo, como la suya, gastan hasta 20 veces más que las modernas del mercado. Más consejos… Luego hay que intentar abrir el frigorífico lo menos posible y cuantas menos veces mejor, tender la ropa antes que poner la secadora, o no abrir el horno para comprobar si los alimentos ya se han terminado de cocinar. Puede escaparse hasta un 20% del calor cada vez que se abre la puerta. La lavadora, por muchas vueltas que se le dé gasta solo 50 céntimos por ciclo de lavado. Es decir, no es de lo peor.

Aun así, hay un truco para ahorrar más que nunca y no tiene mucho misterio. Instalar placas fotovoltaicas para aprovechar las casi 3.000 horas que hay en España de luz al año. No solo se ahorrará en el consumo, sino que la instalación puede salir muy barata gracias a subvenciones públicas. Más rentable que nunca desde que se abolió el impuesto al sol y ya se sabe lo que pasa con los vampiros. Pues lo mismo con la factura de la luz y más a los actuales precios de mercado. Todo el mundo que tenga un tejado debería plantearse ya poner paneles solares y no para hacer aterrizar escobas voladoras. La rentabilidad en el ámbito doméstico ya llega al 10% y eso es ya casi un milagro. Mucho más de lo que ofrece cualquier entidad financiera por un depósito. La magia de la energía solar al alcance de todos.