Batería virtual y segundas residencias
¿Playa o montaña? No importa dónde porque con la batería virtual de Próxima Energía ya es posible compensar la energía de la vivienda habitual con el excedente de la segunda residencia.
Batería virtual y segundas residencias ya bien sea en la playa, en el pueblo o incluso en medio del campo… Algo está cambiando el autoconsumo fotovoltaico incluso en las segundas residencias. Tan solo se utilizan un par de meses al año y hasta ahora era más complicado sacar la máxima rentabilidad a los paneles solares. Difícil recuperar la inversión tan rápido como en la vivienda habitual donde con los actuales precios de la luz se ha acelerado la amortización. De 8 años de media a menos de 5. Sin embargo, en las vacacionales es otra historia porque tienen muchos excedentes y muy poco consumo. Es decir, lo más habitual es que se concentre durante el verano y poco más. Por tanto, como ha explicado Jorge Morales de Labra en La economía de TVE, al final es normal que en todos los restantes días del año sobre una gran cantidad de energía y no era lo deseable.
Ya se sabe… Todas las compañías eléctricas pagan menos por esa electricidad que lo que luego cuesta la que compran los consumidores. La razón muy sencilla. Hay muchos más costes cuando se adquiere un producto que cuando se vende. Pasa un poco como con la agricultura. Al ir al mercado a comprar frutas y verduras hay más costes que el de producción. Está el transporte y la distribución, los márgenes, … Mientras que al agricultor cuando lo vende solo le pagan por el primero de los conceptos. Pues, con el autoconsumo fotovoltaico sucede exactamente igual. Por este motivo, hasta ahora, las segundas residencias eran mucho más complicadas en términos de rentabilidad. Eso sí, afortunadamente ahora ya hay soluciones como con la batería virtual de Próxima Energía. El funcionamiento es también de lo más fácil.
Facturas de la luz siempre 0. Próxima energía revoluciona la gestión de los excedentes con la batería virtual para sacarle el máximo partido a los paneles y no volver a pagarlas nunca más.
En los casos como este en el que hay muchos excedentes se guardan en una especie de hucha. Siempre en su valor equivalente en euros y nunca en kWh. Importante porque en la actualidad la legislación no permite compensarlos todos. No puede haber facturas negativas. Es decir, no se puede llegar a cobrar en la factura de luz. Como máximo puede llegar a ser cero y aquí está la clave del autoconsumo en las segundas residencias. La mayoría de los meses no se pagará por el recibo eléctrico y aun así sobrará un montón de energía que se acaba desperdiciando. Ahora con la batería virtual todo cambia para mejor. ¡Lo de tirarla o despilfarrarla se va a acabar!
Batería virtual y segundas residencias
Mejor guardarla para poder compensar más adelante en siguientes facturas y no solo allí donde están instalados los paneles. También en los domicilios habituales. Por tanto, la batería virtual es la solución ideal para todos los que tienen una casa en la playa y residen en una ciudad donde los problemas para instalar paneles son mayores. Sobre todo, en las comunidades de propietarios en las que es más difícil que todos los vecinos se pongan de acuerdo. Así, se los pueden instalar en las segundas residencias y acumular la energía no utilizada para compensar la factura de donde viven con más regularidad. Sencillo y efectivo. Siempre el máximo descuento en ambas facturas. Sin duda, una propuesta de lo más interesante y más en la actual situación de crisis energética. Facturas 0 en todas las viviendas de un mismo consumidor. Máximo aprovechamiento y rentabilidad.
