El bono social eléctrico, no es solo la mejor tarifa de la luz, además ofrece descuentos de hasta el 40% en el total de la factura sobre un consumo básico, pero ¿basta con eso?
¿Es suficiente el bono social para detener la pobreza energética?La luz y, por supuesto, también calor. Muy importante porque en España la pobreza energética se asocia, precisamente a eso. A no poder asumir el coste de encender la calefacción y pasar frío en invierno. La causa más visible en todos los informativos. Por eso es evidente que el bono social eléctrico se queda corto. Hoy en día prácticamente nadie calienta su casa con electricidad. Raro, es el sistema más caro salvo que se use una bomba de calor. Lo que muy poca gente sabe es que da derecho automáticamente a otra ayuda: el bono social térmico o, lo que en la calle se conoce como, cheque calefacción. Transferencia directa de en torno a 100 euros y cuya cuantía exacta depende de la zona climática en la que se resida. No es gran cosa, pero hasta ahí, todo lógico, y normal. A menor temperatura en invierno mayor importe de subvención.
Curioso que 1 de cada 4 beneficiarios del bono social eléctrico sean familias numerosas sin importar su nivel de renta o que el 50% no tenga menores a cargo.
Importante también porque en España ahora mismo hay acogidas al bono social eléctrico más de 1.300.000 familias. Además, solo durante los últimos meses la cifra ha aumentado en otras 60.000. Demasiado, pero lo más curioso, como ha explicado Jorge Morales de Labra en Las cosas claras de La1, es el reparto. Sí, porque uno de cada 4 beneficiarios son familias numerosas sin importar su nivel de renta. En total, 320.000 con tres hijos o más. Pues más curioso aún es el otro extremo. Por el contrario, el 50% de los beneficiarios no tienen menores a cargo. Cifras cuanto menos chocantes con la idea que se tiene a veces de la pobreza energética. Fuera, por tanto, tópicos. En realidad, hay muy pocas unidades familiares acogidas al bono social con niños.
Eso, por un lado, porque por el otro hay que ver la forma en la que han ido aumentando los diferentes colectivos beneficiarios del bono social eléctrico. Pues las familias numerosas y las que no tienen hijos son las que más crecen. Muy relevante, también, por la forma en que se financia la ayuda. Está incluida en los recibos de la luz y viene a suponer poco más de 5 euros por factura al año. Sí, se paga entre todos, con la generosidad de los consumidores independientemente de su situación económica. Por eso no parece lógico que, aunque la mitad de los fondos recaudados se destinen a ayudar a familias vulnerables que lo necesitan, también se vayan en un 25% a las numerosas sin límite de renta.
El bono social eléctrico se financia con la generosidad de todos los consumidores que en sus recibos han pagado más de 5 euros anuales independientemente de su situación económica.
Afortunadamente todo tiene solución y el bono social no iba a ser menos. No solo se pueden hacer cosas para corregir la situación, sino que se deben poner en marcha ya mismo. Cambio radical en el sistema. Cheque vinculado directamente a la renta para evitar descompensaciones y agravios. Así, lo hacen, sin ir más lejos, en Portugal y no les va nada mal. De hecho, allí es, incluso, automático. Directo, sin papeleos. Mientras en España es fácil perderse en la burocracia. El bono social eléctrico se financia a través del propio recibo de la luz, pero hay que solicitarlo a la compañía, cumplir con los requisitos, rellenar los formularios, … Trámites demasiado difíciles para muchos. Pues no hay ninguna necesidad de complicar las cosas. Toda esa información ya la tiene la Administración a través de la Renta y se podría conceder la ayuda directamente.
