Pagar lo que es justo. Las renovables a su precio. Cada fuente al suyo en función de sus costes de producción y así con el resto de las fuentes de energía. Sencilla la reforma del sistema, para que la electricidad no cueste nunca más lo que marque el mercado del gas.
Se vienen cambios y novedades importantes en el recibo de la luz. Algo que modificará por completo el modo en que se establece la retribución a cada una de las centrales. No era justo que todas cobraran lo mismo. Siempre al más caro con total independencia de sus costes de producción. Los 27 países de la Unión Europea, salvo uno, así lo han acordado… pero poco más se sabe de momento por eso lo normal es que todo el mundo que ya lo haya escuchado se pregunte cuáles son las implicaciones que tendrá en su vida diaria. Es decir, ¿cómo afectará al precio que pagan de la luz en sus facturas?
Explicación sencilla a la reforma del sistema eléctrico
El principio en el que se basa la reforma es relativamente sencillo. Consiste en que las nuevas centrales eléctricas que se están construyendo en Europa cobren en función de sus costes reales de producción. Fundamentalmente serán renovables. Sobre todo, eólica y solar, salvo en Francia que mantiene muy viva su apuesta por las nucleares y ha anunciado el desarrollo de algunos nuevos reactores. Tiene lógica porque lo que no tiene mucho sentido, es que el precio de la energía que producen todas las centrales sea el de la tecnología más cara. La última que entra en el sistema establece la retribución de todas las demás y esa es siempre el gas. Los recibos de los consumidores quedan a merced de un mercado muy inestable y lleno de tensiones. Y, lo cierto, es que suceden muchas cosas y pocas buenas. Además, en ocasiones de auténtica locura.
Además, esta incertidumbre se ha dejado sentir especialmente en los últimos años durante la crisis energética tras la invasión de Ucrania por parte de Rusia. Por encima de los 300 euros por MWh cuando el precio habitual es de 30.
Cambio importante porque en estos momentos, por el sistema marginalista, todas las centrales cobran, el de la más cara de todas que haya entrado en el sistema hasta satisfacer la demanda, que normalmente son las de ciclo combinado.
¿Cómo afectará al precio de la luz el cambio?
Así, lo que ha acordado la Unión Europea es una revolución en el sector. Ya no habrá que estar pendientes cada hora, a través de las apps del móvil, para conocer cuál es el precio de la luz en el mercado eléctrico. Tampoco se mantendrá la incertidumbre de lo que costará la electricidad mañana hasta las 8 de la tarde del día anterior. Nada de eso. Para evitarlo se va a establecer una retribución fija a largo plazo para la energía producida en las nuevas centrales renovables que se construyan. Efectivamente, es algo que tiene mucho sentido. Sin embargo, eso no quiere decir que vaya a bajar la luz y menos aún de forma inmediata. Seguro que lo hará porque la energía eólica y solar son más baratas que el resto de las fuentes, pero a más largo plazo. Sobre todo, la diferencia se va a notar en otro aspecto.
Con la reforma del sistema eléctrico el precio de la electricidad va a ser mucho más estable porque ya no va a cambiar todas las horas de cada día, sino que se establecerá uno fijo a largo plazo para todas las nuevas centrales.
