Igual que el resto de los conceptos… Puede cambiar el nombre que se le dé, pero siempre está en las facturas de los consumidores. En total, 880 millones de euros de ayuda para más de 1,5 millones de beneficiarios.
Más de 1.350.000 consumidores disfrutan del bono social. El importante descuento que tienen las familias vulnerables en el recibo de la luz (y algunas que no lo son tanto). Puede llegar a ser de hasta el 60% del total de la factura en el menor de los casos y de hasta el 100% en los que esté contemplada la ayuda máxima. Eso sí, estos porcentajes son temporales hasta el 31 de diciembre. Luego volverán a sus valores habituales. Entre los que lo reciben se pueden encontrar tres grandes colectivos. En primer lugar, están las rentas bajas, y cuando se dice bajas, realmente lo son. ≤ 1,5 x IPREM de 14 pagas o que traducido a términos que todo el mundo pueda entender son unos 12.600 euros anuales. Antes era algo superior, pero con motivo de la crisis energética se ha bajado para que puedan acceder mayor cantidad de personas.
Uno de los principales problemas que sigue teniendo el Estado del Bienestar es que continúa siendo muy poco redistributivo y lo hace ineficiente con independencia del presupuesto que se asigne a este tipo de ayudas.
Luego ya están los jubilados con pensiones mínimas y eso es un poco menos que la cifra anterior. Exactamente 10.963,40 euros al año, si no tienen cónyuge a cargo. Y, en último lugar, también son beneficiaros del bono social eléctrico todas las familias numerosas sin importar el nivel de renta. Agravio comparativo que en los últimos días ha dado mucho que hablar. Más que nada porque no parece muy razonable que sea así. Las comparaciones son complicadas… 100.000 euros y con tres hijos tienen el mismo derecho e idéntica ayuda que todos los casos anteriores. No parece muy lógico. Por este motivo, hace un mes cuando se destapó la polémica de que determinados cargos públicos con enormes patrimonios la cobraban… la vicepresidenta del Gobierno anunció que se les iba a acabar el chollo en breve.
Mas allá de la luz o la calefacción, los datos de la OCDE siguen siendo contundentes. El 20% más pobre en nuestro país recibe el 12% de las ayudas y el 20% más rico el 30%. Contradicciones del bono social…
Sin embargo, de momento la cosa sigue así. Legalmente tienen todo el derecho del mundo a cobrarlo, aunque moralmente sea reprobable. Sobre todo, porque lo más curioso es la forma en la que se financia el bono social. Tal y como ha explicado Jorge Morales de Labra en La mañana de Andalucía de Canal Sur Radio el dinero no viene de los Presupuestos Generales del Estado como muchas personas piensan. No es dinero público como el que se emplea para la sanidad o la educación. Esa subvención o ayuda la pagan directamente todos los consumidores en la factura de la luz. Sin excepción. Incluso, aunque sus ingresos sean bajos o muy bajos. No es mucho, pero todo suma. Del orden de un euro al mes, pero eso son 12 al año y así ya parece más. En la mayor parte de los recibos viene detallado en una línea a parte.